Letras, pasión y más.

Prohibiciones y ataduras, todo lo visto e imaginable puede ser sensual, erótico, amoroso, solo si se logra ver con «buenos ojos», con sensaciones, con ganas. Pretendo escribir, escribirme y con ello; lograr una complicidad con mis lectores, hacerlos gozar, temblar, creer y hasta humedecerse, porque: ¿a quién no le gusta divertirse?

J. Rooney, así encontrarás mi nombre en escritos, en experiencias propias y ajenas, todas ellas diferentes y semejantes a la vez. Las ganancias carnales, en mi parecer: son la mejor recompensa. Reconozco que cuando mis dedos, mente e imaginación al compás de una excelente melodía se unen para dar vida a mis textos; me excito de sobremanera. La sensualidad que se desprende en ese momento no es más que satisfacción, pues el hecho de divertir a otro ser, es delicioso.